jueves, 8 de diciembre de 2011

Una navidad fuera del aire



Los escuchamos todos los días de camino al trabajo o al final de una larga jornada, podemos reconocer sus voces en el supermercado o el banco, pero no podemos asegurar si son ellos. Pocos son los que conocen el rostro detrás de los micrófonos que conducen su programa de radio favorito, la vida cotidiana y aún más las navidades de quienes nos mantienen informados, nos hacen reír e incluso reflexionar.


Laura Di Benigno, Miguel Guilarte, Adela Sánchez, conocida por todos como “Adelita” y Juana Bellorín coinciden en su pasión por la radio, pero sus navidades son otra historia. Para su esposo Aníbal y Laura, quien conduce el programa El Colectivo, transmitido por La Mega 100.9, la navidad llego acompañada del hermoso caos de la paternidad.
Nueve meses tiene el pequeño Dante, quien celebrará su primera navidad este 2011 y ya se siente atraído por las resplandecientes luces del improvisado árbol de navidad de este joven matrimonio.

“Nuestra navidad siempre es bien particular pues debemos repartirnos entre la familia de mi esposo y la mía, es decir, vamos comiendo un poquito de aquí y de allá” – comentó Laura entre risas – “Para nosotros son muy especiales estas fechas pues mi hermano nos visita. Él Vive en Inglaterra desde hace algunos años por lo que los itinerarios deben ser bien planificados para aprovechar mucho mejor ese tiempito con él, pero este año planificamos hacer algo diferente: Unir a toda la familia. Todos quieren estar con el bebé y es un buen momento para volver de ello una tradición”.


La locutora contó que entre algunos de sus recuerdos más preciados de fiestas pasadas está la noche que pudo presenciar un gran espectáculo de fuegos artificiales, en compañía de su suegra, su esposo y otros familiares, desde la azotea del edificio donde vive.

“Debo confesar que no tenemos arbolito ya que por lo general terminamos en casa mi mamá. Esta ocasión por ejemplo, improvisamos nuestro arbolito con un exótico coral negro que nos regalaron hace algunos años y que está en un rinconcito de la casa al que Dante no tiene acceso por seguridad. Fue bastante difícil decorarlo entre tratar que el niño no tomara los adornos y jugar con él, pero la meta de este año será tener nuestro primer arbolito”, aseguró Di Benigno.

¿Sin mucho protocolo?


Aunque así se llama el programa que Adelita Sánchez conduce todas las tardes, por Onda 91.5, su diciembre está bien planificado. “Tomamos un día para hacer las compras y otro para decorar en familia, y hacer las hayacas todos juntos es una tradición. Tengo 3 hijos ya grandecitos que detestan tener que limpiar las hojas, gracias a Dios ya vienen limpias”, contó riendo Sánchez.


“Mis navidades siempre han sido hermosas y aunque casi nunca me traían lo que yo pedía el niño Jesús siempre fue lo máximo para mí”, comentó la irreverente publicista. “Mi mama siempre fue bastante estricta y, al igual que Cenicienta, yo debía estar en casa a las 12 de la noche por lo que mi primer amanecer patinando en Los Próceres es uno de los recuerdos más bonitos que conservo. Eso sin mencionar todas las veces que fui a escuchar gaitas en el Poliedro de Caracas”, explicó Adelita quien lleva 17 años viviendo en Puerto La Cruz.


Por ahora, y pese a la distancia, intenta mantener la tradicional reunión familiar con quienes pueden asistir a su casa en estas fechas, siendo su mamá una de las invitadas más especiales.

¡Entre más, mejor!


Cuatro son los hermanos Bellorín que junto a Juana hacen cinco. La vicepresidenta del grupo Unión Radio gusta de pasar las fiestas decembrinas en casa entre su extensa familia, que mantiene esta tradición durante todo el año pues cada domingo se reúnen para compartir la mesa. Para este 2011, una nueva integrante perfecciona su gateo para apoderarse de los regalos bajo el árbol Bellorín. Se Trata de Ana Belén, la primera hija de Juana que en esta ocasión también celebrara su primer diciembre.

“Tenemos por costumbre reunirnos todos los fines de semana y tratamos de trasladar esa tradición a nuestras navidades. Para estas fiestas planificamos conservarla pues para nosotros es muy importante mantenernos unidos”, aseguró la ejecutiva.

Los intercambios de regalo entre la familia son episodios que Bellorín recuerda con cariño, al igual que despertar todos los 25 de diciembre para destapar los regalos que dejaba el niño Jesús bajo la cama. “Ya más grande y mucho antes de entrar en el mundo de los medios, recuerdo en particular lo satisfactorio de conseguir mi primer trabajo y de haber podido darle los regalos que yo quería a mi mamá y al resto de mi familia con el sueldo que yo misma me gané. Ese en definitiva es un excelente recuerdo”.


Una Navidad sin anécdotas


Así son los diciembres de Miguel Guilarte para quien la época decembrina se ha convertido en un caos. Largas colas, pocos puestos de estacionamiento, calles abarrotadas de gente y el sonido de las gaitas que desde muy temprano inunda la ciudad para mantenerse durante todo el día.
“Nada. Eso hago en navidad. Esos días para mí son iguales al resto de los días del año.


Me molesta la actitud que toma la gente de comprar regalos compulsivamente pues se sienten obligados a hacerlo. Es algo que pueden hacer durante el resto de los meses y no lo hacen quien sabe porque razón”, aseguró el conductor del programa Anécdotas, que se transmite todos los días por Éxitos 95.3 fm.

“Vivo en una zona considera turística por lo que todo se complica. No puedo salir de mi casa con tranquilidad, comprar algo con tranquilidad y en definitiva no puedo hacer nada con tranquilidad”, explicó el locutor.


Para Guilarte, el concepto de navidad ha sido distorsionado a lo largo de los años pues teóricamente sólo debería celebrarse el nacimiento de Jesús. “¿Y quién recuerda eso? Al parecer nadie. La navidad debería ser intercambiar hayacas o dulces típicos entre amigos ¿y los detalles? Sólo para la familia”.

¿Su decoración? Un arbolito metálico de 40 cm y un nacimiento de cinco. “Cuando termina la navidad me toma dos minutos ponerlos nuevamente en su lugar”.


Redacción: Yubelys Flores

Publicado por: Jackelyn Pinto

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